Los quesos que no pueden faltar en tu mesa estas Navidades
La Navidad es ese momento del año en el que todo gira alrededor de la mesa: la familia, las risas, los reencuentros… y, por supuesto, la buena comida. Y si hay un producto que nunca falla y siempre triunfa, ese es el queso. Versátil, elegante y perfecto para compartir, el queso es uno de los grandes protagonistas de las cenas navideñas.
Si este año quieres acertar de lleno, toma nota de esta selección de quesos ideales para sorprender a todos tus invitados.
Quesos curados: el sabor que marca la diferencia
Los quesos curados aportan carácter, fuerza y ese punto intenso que tanto apetece en Navidad. Son perfectos para abrir boca acompañados de un buen vino tinto, frutos secos o jamón ibérico. Un clásico indiscutible es el Queso Manchego curado: equilibrado, con personalidad, y siempre bien recibido. También triunfan los quesos de oveja curados y los quesos de mezcla, ideales para dar variedad a tu tabla.
Quesos tiernos y semicurados: suavidad para todos los gustos
No todos buscan sabores potentes, y ahí entran en juego los quesos tiernos y semicurados. Cremosos, suaves y muy fáciles de disfrutar, son perfectos para los más pequeños o para quienes prefieren un bocado más delicado. Funcionan de maravilla con pan crujiente, picos artesanos o incluso un toque de mermelada. Además, ayudan a equilibrar la tabla cuando se combinan con quesos más intensos.
Quesos internacionales: un toque gourmet para sorprender
Si quieres elevar tu mesa de Navidad a otro nivel, los quesos internacionales son una apuesta segura. El Brie o el Camembert destacan por su cremosidad y su elegancia, especialmente si se sirven a temperatura ambiente. Para los amantes de los sabores fuertes, el Roquefort es una auténtica delicia junto a nueces, peras o un hilo de miel. Y si buscas un queso duro, lleno de matices y perfecto para presentar en lascas, el Parmigiano Reggiano es siempre un acierto.
Cómo preparar una tabla de quesos perfecta en Navidad
La clave está en el equilibrio. Lo ideal es combinar al menos cuatro tipos de queso:
Uno tierno
Uno semicurado
Uno curado
Uno especial (azul o internacional)
Acompáñalos con uvas, frutos secos, mermeladas artesanas, picos y diferentes tipos de pan. Preséntalos en tablas de madera o pizarra para darle un aire cálido y navideño. Un pequeño cartel con el nombre de cada queso hará que la experiencia sea aún más especial.
El queso, ese imprescindible que nunca falla
El queso no es solo un entrante: es un punto de encuentro, una excusa para compartir y disfrutar sin prisas. En Navidad, una buena tabla de quesos puede convertirse en la gran protagonista de la noche. Elegir bien las variedades, cuidar la presentación y apostar por productos de calidad hará que tus invitados recuerden tu mesa durante mucho tiempo.